INDICE DEL BLOG

Por eso, no hay que dejar pasar varios días sin volver a rogarle al Espíritu Santo que nos pacifique por dentro con su caricia de amor.
También para esto se puede utilizar la imaginación:
Tomo conciencia de las cosas que me están perturbando por dentro e imagino cada una como una gota que cae y se hunde en un arroyo que la arrastra. Hasta que siento dentro de mi corazón un dulce vacío. No han quedado perturbaciones, y ahora ese hueco se llena de calor, de fuerza, de vida, de fuego que consume todo resto de preocupación: Es el fuego del Espíritu Santo que todo lo invade.
¿Qué son los cinco minutos del Espíritu? Entra y descubre el libro del arzobispo D. Víctor Manuel Fernández que está recorriendo el mundo en una cadena de oración al Espíritu Santo y no dejes de reenviar el enlace de "Amigos para Ayudar" para que llegue a más personas.
Puedes encontrar el libro en Amazon
Comentarios
Publicar un comentario